
Salir a cenar con amigos puede ser genial… hasta que llega ese momento: ¿cómo pagamos la cuenta?
¿Pagamos todos juntos o cada uno lo suyo? ¿Con tarjeta, efectivo o mezcla? ¿Quién adelanta y después pasa el número de cuenta, el Bizum o recibe el efectivo?
Según Poste Media ok, en España, muchos bares y restaurantes están cansados del enredo y aplican una regla clara: una mesa, una cuenta.
Nada de dividir el pago entre los comensales si van a pagar con tarjeta. El que se sienta a la mesa, comparte el gasto… al menos de cara al restaurante.
De este modo, La Sexta informó que esta práctica se está extendiendo en Málaga, pero también hay registros en otras zonas como Aragón y Cataluña. Y no falta el debate en redes sociales, TikTok y Reddit: ¿es legal que te obliguen a pagar todo junto?
¿Por qué lo hacen los locales?
Por pura practicidad. Mozos y dueños aseguran que dividir cuentas entre 10, 15 o 20 personas ralentiza el servicio, genera errores, y puede hasta descuadrar la caja. Algunos clientes piden pagar solo lo que consumieron exacto, lo que vuelve todo aún más complicado.
¿Y si igual querés pagar por separado?
Algunos bares ya lo permiten, pero cobran un “suplemento por cuentas separadas”. Un euro si son hasta 8 personas, dos euros si son hasta 12, y así. Según ellos, ese costo cubre el tiempo y los recursos extra que implica dividir el cobro.
¿Es legal esto?
Sí… siempre que el cliente esté informado. Si el bar lo aclara en un cartel o menú, hay una “oferta contractual” y el cliente acepta al sentarse. Pero si no hay aviso previo y al final se niegan a fraccionar el cobro, el cliente puede reclamar.
El dilema está servido:
Los bares buscan agilidad y evitar líos.
Los clientes quieren comodidad y no tener que andar cobrando por WhatsApp después.