
Con la mirada puesta en revitalizar su pulso nocturno, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires puso en marcha el plan “Buenos Aires 24 Horas”, una iniciativa que promete extender el entretenimiento, reforzar la seguridad y potenciar los servicios para quienes trabajan, viven o disfrutan la noche porteña.
Con BA 24 acompañamos a los que trabajan cuando otros duermen, y protegemos a los que disfrutan y descansan. Queremos potenciar la noche y llevar la cultura porteña a otro nivel”, afirmó el jefe de Gobierno, Jorge Macri.
La iniciativa, presentada oficialmente por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, llega en un momento clave: al inicio de la temporada alta de eventos masivos y con el objetivo concreto de consolidar a la Capital Federal como “una de las capitales del entretenimiento nocturno más activas y destacadas del mundo”.
En su fase inicial, el plan contempla una intervención focalizada en ocho zonas estratégicas de la ciudad: Plaza Serrano, Paseo de la Infanta, Avenida Corrientes, Abasto, el Microcentro, Caballito, Villa Devoto y el Distrito Joven Costanera.
En cada una de estas áreas se aplicarán horarios especiales de funcionamiento que, por ejemplo, para Plaza Serrano implican apertura desde las 19 h hasta las 03 h los jueves y domingos, y hasta las 06 h los viernes y sábados.
Las medidas no se limitan a fomentar la vida nocturna: la infraestructura y los servicios se verán reforzados.
Se prevén operativos de control y vigilancia, aumento de la presencia policial, renovación de luminarias, instalación de señalética y medidas para ordenar el tránsito y nuevos estacionamientos en zonas de alto movimiento como la Costanera y Palermo.
Además, habrá ambulancias y motos médicas desplegadas en los espacios de mayor concurrencia para garantizar una respuesta rápida ante emergencias.
En el plano del transporte público —uno de los ejes fundamentales para que la nocturnidad funcione de manera fluida—, el plan contempla la extensión de horarios y la mejora en la frecuencia. Siete líneas de colectivo —108, 99, 107, 25, 7, 109 y 115— verán intervalos de 20 a 30 minutos entre las cero horas y las cinco de la madrugada.
Además, la red del subte está prevista para extender su servicio en noches de eventos especiales, lo que facilitará la conexión entre zonas de ocio y centros de transbordo.
Según los datos oficiales aportados por el Gobierno porteño, la Ciudad alberga hoy aproximadamente 5.000 establecimientos que funcionan por la noche, entre espacios gastronómicos, culturales, de entretenimiento y venta de alimentos.
Este sector brinda empleo a 50.616 personas, principalmente en los rubros de gastronomía y entretenimiento, lo que subraya la importancia económica del proyecto.
El programa se inscribe dentro de una mirada más amplia de planificación urbana: está inspirado en una red global de más de 80 ciudades que ya implementan políticas integrales de gestión nocturna, combinando ocio, seguridad y trabajo.
Según fuentes oficiales, esta iniciativa es considerada una de las “50 grandes transformaciones de la Ciudad hacia 2027”.
Desde mi experiencia cubriendo la evolución urbana y cultural de Buenos Aires, reconozco que la apuesta sector nocturno siempre ha sido un pilar identitario de la ciudad: desde la gastronomía hasta los teatros, pasando por la cultura de bar y boliche.
Sin embargo, en los últimos años, esa dinámica sufrió contracciones por factores que combinaban costos, inseguridad, transporte público limitado y cambios en los hábitos de consumo.
Con este plan, la administración local intenta recomponer ese circuito con acciones concretas, alineadas al bolsillo del vecino, al turista y al emprendedor que ofrece servicios nocturnos.
No obstante, como periodista con seguimiento del tema, también advierto que la implementación tendrá retos: asegurar la continuidad más allá de la “temporada alta”, garantizar que los refuerzos de transporte y luz no queden como iniciativas simbólicas, y que la convivencia entre ocio y descanso vecinal se maneje con sensibilidad.
Por ejemplo, en barrios como Villa Devoto o Caballito, donde los horarios se extienden hasta las 02 o 01 de la madrugada, habrá que calibrar los controles de ruido, tránsito y seguridad para evitar conflictos con los residentes.
Otro aspecto clave será el monitoreo del impacto económico real: si bien los números iniciales indican empleo y volumen de establecimientos, la reactivación del sector dependerá también de la demanda, la confianza del empresario nocturno y la inversión privada.
La oferta ampliada debe ir acompañada por una gestión urbana capaz de sostenerla: cámaras, iluminación, logística de transporte, guías de señalética, estacionamientos suficientes, y fiscalización eficiente de irregularidades como “trapitos” o espacios que operan fuera de norma. En ese sentido, el plan ya contempla medidas específicas para estos ítems.
También hay un componente cultural que me parece relevante: los eventos como la Noche de los Museos, la Noche de las Librerías, la Noche de las Heladerías y el ciclo Retiro Abierto forman parte del plan de activación del ocio para los próximos meses.
Esto habla de que la apuesta no es únicamente económica sino también simbólica: volver a posicionar a Buenos Aires como una ciudad que vive la noche, la cultura y la socialidad con intensidad.
Por mi parte, estaré atento al despliegue operativo de estas medidas en campo —cómo se comportan los colectivos reforzados, la extensión de subtes en noches de gran afluencia, la experiencia del vecino que vive al lado de alguna de esas zonas clave, la respuesta del sector gastronómico y del entretenimiento— para seguir contándolos con rigor, contexto y mirada local.
En definitiva, Buenos Aires lanza una apuesta audaz: recuperar la noche, expandir las oportunidades y reactivar la economía mientras cuida al que trabaja, al que disfruta y al que descansa. Solo el tiempo dirá si “BA 24 Horas” logra hacerse realidad en cada cuadra, cada colectivo y cada bar porteño.
La entrada La Ciudad extiende la noche con el plan “BA 24 Horas” se publicó primero en Noticias Vecinales.



