
A casi un año de su lanzamiento, la Biblioteca Pública Digital Jorge Luis Borges se afianza como una de las herramientas culturales más democratizadoras de la Ciudad de Buenos Aires.
Con acceso libre y gratuito, y un catálogo diverso y en constante expansión, esta plataforma virtual está transformando la forma en que leemos, aprendemos y accedemos al conocimiento.
Hoy tenemos lectores que se conectan desde cualquier rincón de la Ciudad, eligiendo qué leer entre miles de títulos, sin barreras ni horarios. Eso era impensable hace algunos años, explica un bibliotecario de la Red de Bibliotecas Públicas, que celebra el crecimiento sostenido de usuarios activos.
La Biblioteca Pública Digital Jorge Luis Borges, una iniciativa impulsada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, celebra en junio su primer aniversario.
En tan solo doce meses, logró convertirse en una referencia para los amantes de la lectura, con más de 250.000 accesos mensuales a libros, audiolibros, revistas y contenidos educativos. Su mayor fortaleza: la gratuidad, la facilidad de uso y la amplitud de su oferta.
Durante el mes de mayo, los usuarios destacaron diez títulos que marcaron tendencia dentro de la plataforma.
En primer lugar se posicionó Escribir un silencio, de Claudia Piñeiro, una autora ya consolidada en la literatura argentina, seguida por Si sintieras bajo los pies las estructuras mayores, de Roberto Chuit Roganovich, una obra que explora lo humano desde una óptica filosófica y existencial.
Completando el podio está El país que quieren los dueños, del periodista Alejandro Bercovich, un ensayo político y económico que resuena con la coyuntura actual.
También se colaron entre los más elegidos nombres reconocidos como Jorge Fernández Díaz, Eduardo Sacheri, Samanta Schweblin y Selva Almada, mostrando que el público busca tanto ficción como reflexión crítica, autoayuda y ciencia accesible. Incluso clásicos como El hombre en busca de sentido de Viktor Frankl mantienen su vigencia, demostrando que los grandes textos no pasan de moda.
Pero no todo se trata de los más vendidos. La plataforma también impulsa títulos que quizás no gozan de una masividad inmediata, pero que permiten enriquecer el acervo cultural de quienes la visitan.
Así, aparecen joyas como La clase de griego de Han Kang, la narrativa de Liliana Bodoc en El mapa imposible, y los cuentos infantiles de María Elena Walsh que siguen emocionando a generaciones enteras.
La app Biblioteca Digital BA, disponible para Android e iOS, ha sido una clave para potenciar el uso de esta herramienta.
Con una interfaz amigable y moderna, permite leer en línea, descargar materiales, organizar favoritos y hasta escuchar audiolibros, una función muy valorada por personas con discapacidad visual o quienes prefieren consumir literatura en movimiento.
El acceso es simple: quienes tengan domicilio en Capital Federal pueden asociarse gratuitamente a la Red de Bibliotecas Públicas completando un formulario online.
Una vez registrados, podrán acceder a toda la colección desde la web oficial o la app. Para consultas, los usuarios pueden escribir a bibliotecadigitaldelaciudad@buenosaires.gob.ar.
En un contexto donde muchas veces se restringe el acceso a bienes culturales por motivos económicos o logísticos, esta biblioteca digital irrumpe como un acto de justicia social.
Según datos oficiales, en lo que va del año ya se han sumado más de 80.000 nuevos usuarios, y se estima que la cifra seguirá creciendo a medida que más personas descubran sus beneficios.
La Biblioteca Pública Digital también representa una oportunidad para fomentar el hábito de la lectura entre los más jóvenes.
Gracias a su sección infantil y juvenil, miles de estudiantes acceden a textos escolares, novelas gráficas, cuentos clásicos y contemporáneos, fortaleciendo el vínculo entre tecnología y literatura.
En paralelo, se está trabajando en convenios con escuelas públicas y privadas para integrar estos contenidos a los programas educativos.
En grupos de lectura, foros y redes sociales, miles de usuarios comparten sus recomendaciones, opiniones y reseñas, generando un ecosistema digital de lectores activos. Es una biblioteca sin paredes, donde el saber circula libremente.
En tiempos en que el acceso al conocimiento se vuelve cada vez más estratégico, la Biblioteca Pública Digital Jorge Luis Borges se levanta como una de las iniciativas más inclusivas, modernas y necesarias de la Ciudad. Leer, compartir y aprender nunca fue tan fácil ni tan vital.